lunes, 27 de agosto de 2012

EXPERIENCIA 11: CONSTRUCCIÓN DE UN INVERNÁCULO CON BOTELLAS DESCARTABLES.

Este proyecto lo iniciamos el año pasado. La planificación del mismo lo pueden encontrar en: PROYECTO INSTITUCIONAL 2011
Un año y medio nos llevó la construcción del invernáculo con botellas descartables. La dificultad mayor fue lograr reunir la cantidad suficiente de botellas. Ello se debe a que la población de nuestra zona no es numerosa, por lo que tuvimos que solicitar ayuda a amigos y conocidos para lograr nuestro objetivo.

¿Por qué apoyé este proyecto?

Cuando con las docentes acordamos trabajar desde una perspectiva constructivista, buscamos recursos que favorecieran aprendizajes significativos. Por experiencia sabemos que las actividades que se realizan tanto en la huerta como en el invernáculo, ofrecen innumerables oportunidades de educación. Desde la construcción del invernadero hasta la venta o consumo final de los productos, nos encontramos con múltiples situaciones didácticas.
Pero hay algo más, algo que tiene que ver con la comunidad: La escuela debe intervenir en la vida de la comunidad y debe actuar en ella a puertas abiertas. La huerta y el invernáculo es un lugar donde participan los docentes, los alumnos y la comunidad. Las actividades son muy útiles para mejorar la presencia e incidencia de la escuela en el medio. Estimulados con la participación en la producción, la cosecha y el preparado de alimentos, se logra la aceptación de una alimentación saludable. Y la mejor señal de que nuestros esfuerzos han dado su fruto, es ver que estas actividades se proyectan en el hogar. Observar que hemos transmitido técnicas para la auto producción de alimentos en pequeñas escalas es una de mis tantas aspiraciones.





¿Por qué utilizar botellas descartables en lugar de polietileno de 150 o 200 micrones de espesor?

Conversando con muchas personas uno puede formarse una idea de las aspiraciones y dificultades de la gente de la comunidad. Muchos me decían que construir un invernáculo de botellas era prácticamente imposible, una pérdida de tiempo, que se desarmaría con el primer viento fuerte. Cuando hablábamos de las ventajas de cosechar nuestras propias verduras, por los sanas y de buen sabor, siempre les preguntaba por qué no construían sus propios invernáculos. Obtenía respuestas de todo tipo, pero la más común era: "el polietileno sale un ojo de la cara". Y eso es muy cierto. Realmente es caro.
Así que había que probar que se podía utilizar otros materiales, y que no se lo llevaría el primer viento fuerte que se nos viniera por aquí.
Por otra parte, siempre la pasamos hablando del cuidado del medio ambiente, pero del dicho al hecho hay un largo trecho. También educamos con el ejemplo. Y qué mejor ejemplo que reutilizar esos envases que tiramos porque no sabemos muy bien qué hacer con ellos.

La construcción paso a paso.

Para la estructura se utilizaron postes de madera tratada y varejones de eucaliptus para las tijeras.
El techo se realizó con polietileno para invernáculo por cuestiones de practicidad.
Las columnas para construir las paredes se realizaron con botellas descartables de 2 y 2,5 litros.
Se ataron las columnas a las 3 hileras de alambre guía. Para atarlas se utilizó alambre cocido.
Se dejó un espacio para la ventana.
La puerta se cubre con el mismo polietileno utilizado para el techo.
Por las dimensiones reducidas, en este invernáculo se cultivará en cajones, macetas, etc, dispuestos en estanterías.


En este espacio participan docentes, alumnos y la comunidad. La planificación interdisciplinaria es un desafío. Se incorporan conceptos sobre salud, alimentación, prevención de enfermedades y formas de funcionamiento de la naturaleza. En consecuencia, el docente se transforma en un educador integrador y sistémico.

DEBEMOS MEJORAR O CAMBIAR:

a) El alambre para atar las columnas que utilizamos se oxida y mancha las botellas. Debimos utilizar otro tipo de alambre. Por ahí serviría el de los cables de electricidad que son de aluminio, maleables y no presentan el problema del óxido.

b) Algunas botellas presentan un corte desprolijo. Debemos extremar el cuidado cuando realizamos los cortes del fondo de las botellas. Si éstos no son prolijos y perfectos, quedan puntas que luego lastiman cuando pasamos la mano por ellas. Este cuidado es esencial, máxime sabiendo que los usuarios de este espacio son niños.




4 comentarios:

  1. ¡Felicitaciones a toda la comunidad educativa!

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  2. Respuestas
    1. Gracias Alejandra!! Realmente ha sido una experiencia muy productiva en todo sentido, para la comunidad en su conjunto y demostramos que se puede y no se rompe con cualquier viento. Ya tiene 4 años y sólo le hemos cambiado el nylon del techo!!

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Utilizo la ventana de comentarios para reflexionar sobre las prácticas. De este modo evito tener que editar las entradas cada vez que debo realizar una apreciación. Sin embargo, esto no impide a otra persona que abra mi portafolios, realizar su aporte. La valoración de otras personas es muy útil a la hora de evaluar. Gracias!!

DATOS Y ESTADÍSTICA